Y tiene medias de mujer
Wednesday, October 03, 2018
Palermo, Buenos Aires, 29 de septiembre de 2018 |
Instrucciones-ejemplos sobre la forma de tener miedo – Julio Cortázar
En un
pueblo de Escocia venden libros con una página en blanco perdida en algún lugar
del volumen.
Si un lector desemboca en esa página al dar las tres de la tarde, muere.
En la plaza
del Quirinal, en Roma, hay un punto que conocían los iniciados hasta el siglo
XIX, y
desde el
cual, con luna llena, se ven moverse lentamente las estatuas de los Dióscuros
que luchan con sus caballos encabritados
En Amalfí,
al terminar la zona costanera, hay un malecón que entra en el mar y la noche.
Se oye ladrar a un perro más allá de la última farola.
Un señor
está extendiendo pasta dentrífica en el cepillo. De pronto ve, acostada de
espaldas, una diminuta imagen de mujer, de coral o quizá de miga de pan
pintada.
Al abrir el
ropero para sacar una camisa, cae un viejo almanaque que se deshace, se
deshoja, cubre la ropa blanca con miles de sucias mariposas de papel.
Se sabe de
un viajante de comercio a quien le empezó a doler la muñeca izquierda,
justamente debajo del reloj de pulsera. Al arrancarse el reloj, saltó la
sangre: la herida mostraba la huella de unos dientes muy finos.
El médico
termina de examinarnos y nos tranquiliza. Su voz grave y cordial precede los
medicamentos cuya receta escribe ahora, sentado ante su mesa. De cuando en
cuando alza la cabeza y sonríe, alentándonos. No es de cuidado, en una semana
estaremos bien. Nos arrellanamos en nuestro sillón, felices, y miramos
distraídamente en torno. De pronto, en la penumbra debajo de la mesa vemos las
piernas del médico. Se ha subido los pantalones hasta los muslos, y tiene
medias de mujer.