No tenía nada de fantasma pero hablaba poco y con pocos, caminaba sobre suelas de goma y se vestía con una campera negra y pantalones terrosos, los ojos rápidos para el quite y el despegue, algo que la dueña de la pensión llamaría furtividad; no era un fantasma pero se lo sentía lejos, la soledad lo rodeaba como otro silencio, como el pañuelo blanco en el cuello, el humo del faso pocas veces lejos de esos labios casi demasiado finos.
Tango de vuelta
(Queremos tanto a Glenda, 1980) – Julio Cortázar
Las prendas tienen nombres particulares en mi Argentina. Un ejemplo es la remera ( y no confundir con ramera o prostituta):
Prenda de ropa interior o deportiva, ligera, de punto, de hechura recta, sin cuello y con escote de distinto tipo, de manga larga, corta o sin mangas, que cubre el cuerpo hasta la cadera o medio muslo.a camisas blancas de manga corta.
Al leer Rayuela de Julio Cortázar vi la palabra canadiense. Es una camisa de franela tipo las que usan los corta árboles en el Canadá.
Pero una prenda que para mí tiene un nombre especial es la campera y en particular la de cuero negro.